sábado, 29 de junio de 2013

Dos Toreros y una actitud

Dos Toreros y una actitud
Por  Paco Gallardo
José Antonio "El Lauri"
José Antonio Lavado

Me refiero a la mantenida en el día de hoy por los alumnos de la Escuela Taurina de la Diputación de Málaga: José Antonio Lavado en el Certamen de Novilleros de Canal Sur y José Antonio  “El Lauri”, en el  Certamen de Escuelas Taurinas de la Comunidad de Madrid. Los dos han demostrado una actitud que necesita no sólo de disposición sin límite, sino de un trabajo serio y constante en otras facetas distintas a la técnica o al conocimiento del toreo.


Han iniciado casi a un mismo tiempo y en plazas distintas las dos faenas de forma idéntica en las apariencias, en los medios de rodilla, ambos necesitan de su definición como toreros, pero han dejado presente que por ilusión, disposición y actitud no será. 


La actitud del “Ser”, la que está por encima de las circunstancias que nos rodean, aquella que pretende imponerse a pesar de todos, y digo todos los contrarios, es la única que puede acompañar a empresas en las que se está dispuesto a entregar la vida, y esta de ser Torero es una de ellas. 


La fe en el triunfo, y en uno mismo, que además es lo mismo, permítanme la redundancia, es imprescindible para íncarse de hinojos, sin el bagaje técnico, a treinta metros de un eral o un añojo y citarlo con la muleta y el corazón por delante. También es la necesaria para que los aficionados pierdan la cuenta de volteretas y batacazos que se recibe en esa misma faena o para entrar a morir y a matar.


Encomiable trabajo, no sólo técnico, también de concepto y moral de la Escuela Taurina de nuestra ciudad, que esperamos no se choque con un espíritu distinto en los carteles de la próxima feria, muy próximos a surgir, y que en ella podamos ver carteles abiertos, competencia leal y franca entre los que ya llevan tiempo representando el pasado y los que una y otra vez no ven sus esfuerzos recompensado por la comodidad de tantos y la incoherencia del entramado taurino. 

La necesaria renovación, también en la cartelería: Carteles abiertos


La actitud de querer triunfar, de estar dispuesto de entregarlo todo, la posibilidad de estos chavales de poder llegar a “Ser” Toreros, públicamente reconocidos, y coronar sus sueños pasa por abolir el aburrimientos de los que nos atrevemos a ir a los toros y abrir la puerta de las posibilidades a nuevos hombres, nuevos nombres en lucha legítima ante el Toro.

Existe afición aunque en fotos

 Siempre los buenos aficionados han soñado  con la faena imposible, la perfecta, aquella que para “ser”, se da también en esta competencia, ante el rival consagrado o la sorpresa de la temporada, sin esta amplitud, no hubiera existido, “la mejor tarde de mi vida” reconocida así por el propio Belmonte, ante los gritos de la afición al demandar aquellos de “los dos solos” refiriéndose a Gaona y a José, y salir su toro e imponer la ética del “Ser”; y tantas otras que han hecho grande y hermoso este arte de los Toros.

Soledad en el ocaso de la Malagueta

Seguiremos soñando con la faena perfecta, la que necesita del plus de valor que nos enseña Icaro al resurgir de sus cenizas, aquel que un adversario real nos proporciona, y no es sólo el toro. La respuesta la tendremos pronto en nuestra querida Málaga, la primera en el peligro de la Libertad, la que necesitan los nuevos ídolos de unas generaciones que no conocen el toro.